Cónclave del 7 de mayo de 2025
Primera fumata negra en el Vaticano: la votación termina sin consenso para elegir papa y el proceso sigue mañana | Más de 45.000 personas se congregan en la Plaza de San Pedro a la espera del resultado de la votación, que se ha prolongado más de tres horas

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El primer día de cónclave para elegir al sucesor de Francisco termina con fumata negra, es decir, sin consenso en el nombre del nuevo pontífice. El humo ha salido de la chimenea al filo de las nueve de la noche, más de tres horas después del inicio de la votación. A las 17.46, se cerraron las puertas de la Capilla Sixtina después de que el maestro de las ceremonias de la Santa Sede, Diego Ravelli, pidiera a todos los no electores que salieran con las palabras “extra omnes (todos fuera)”. Los 133 cardenales con derecho a voto se recluyeron sin ninguna comunicación con el exterior para votar. Más de 45.000 personas esperaban el resultado fuera, en los alrededores de San Pedro. Mañana jueves se retoma el cónclave. A partir del segundo día, habrá cuatro escrutinios diarios, dos por la mañana y dos por la tarde. Si después de tres días los cardenales no se han puesto de acuerdo y nadie obtiene los 89 votos necesarios —dos tercios del total—, dispondrán de un día de pausa para reflexionar. Una parte de los purpurados quiere proseguir el camino del difunto Pontífice; otros, corregir el rumbo. Cuando por fin se produzca la fumata blanca, el 267º papa se presentará ante los fieles.

Buenos días. Arrancamos la narración en directo de la última hora del cónclave para elegir al nuevo papa, el pontífice número 267 de la Iglesia católica. Este miércoles 7 de mayo, 133 cardenales de 71 países se aislarán, a partir de las 16.30, en la Capilla Sixtina para comenzar el cónclave y elegir al sucesor de Francisco, fallecido el 21 de abril a los 88 años. Para ser elegido, el nuevo papa deberá reunir al menos 89 votos, es decir, dos tercios del total. Se espera que la primera fumata se produzca ya esta tarde, a partir de las 19.00, aunque previsiblemente será de color negro, lo que significa que no hay acuerdo. A pesar de perfilarse como un cónclave con fuertes divisiones entre los que abogan por seguir el recorrido de Francisco y los que no, y sin candidatos fuertes de ninguno de los dos bandos, algunos nombres se repiten en las quinielas internacionales como nuevo pontífice. Uno de ellos es el del hasta ahora número dos del Vaticano, Pietro Parolin. También destacan los nombres de otros dos cardenales italianos, Matteo Zuppi y Pierbattista Pizzaballa, el filipino Luis Antonio Tagle, el estadounidense Robert Francis Prevost o el arzobispo de Budapest, el conservador Peter Erdö.

Vídeo | La Capilla Sixtina está lista para albergar el cónclave que elegirá al nuevo papa
El Vaticano ha concluido los preparativos para la votación que comienza este miércoles, con el santuario adaptado para la elección y la Sala de las Lágrimas dispuesta para recibir al nuevo pontífice.

Un obispo católico camina por una callejuela cerca del Vaticano este miércoles. / Kevin Coombs / REUTERS
La agenda del cónclave
10.00 El cónclave para elegir el sucesor del papa Francisco arranca este miércoles con la misa Pro eligendo Pontifice, presidida por el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re. Se celebra en la basílica de San Pedro, en el Vaticano.
16.15 Los cardenales se dan cita en la capilla Paulina y desde ahí, ataviados con sus hábitos rojos y blancos, procesionan entonando las letanías y el canto Vieni Creator hasta la Sixtina.
16.30 Los cardenales entran en la Capilla Sixtina. Una vez allí, deben prestar juramento uno a uno con la mano sobre el Evangelio. Después, el maestro ceremoniero de la Santa Sede, Diego Ravelli, expulsa de la capilla a todo aquel que no vista la púrpura con la fórmula en latín Extra omnes (Fuera todos) y cierra las puertas. A continuación, se celebra una catequesis para inspirar a los votantes, dirigida por el cardenal Raniero Cantalamessa (quien no cuenta con derecho a voto). Al terminar, sale de la capilla junto al arzobispo Ravelli para que empiece la votación.
19.00 La primera fumata se espera esta tarde sobre las 19.00, aunque lo más probable es que la elección del nuevo papa no se produzca en la primera votación. La chimenea en lo alto de la capilla emanará el humo de los votos quemados por los cardenales en una estufa: si es de color negro, no ha habido acuerdo; si es blanco, hay nuevo papa.
La agenda de los días siguientes.
7.30 Los cardenales celebran una misa.
9.00 Los cardenales rezan el laudes dentro de la Capilla Sixtina. La legislación de la Santa Sede prevé cuatro escrutinios al día, dos por la mañana y dos por la tarde.
10.30 Solo habría fumata, que sería blanca, si en la primera votación de la mañana se eligiese papa.
12.00 Si se eligiese pontífice en la segunda votación de la mañana o no se hubiese llegado a un acuerdo, la fumata blanca o negra, en cada caso, sería sobre el mediodía.
16.00 Comienza la segunda sesión con dos nuevas votaciones.
17.30 Solo habría fumata, que sería blanca, si en la primera votación de la tarde se eligiese papa.
19.00 Si se eligiese pontífice en la segunda votación de la tarde o no se hubiese llegado a un acuerdo, la fumata blanca o negra, en cada caso, sería a partir de las 19.00. Si no hubiese nuevo papa, los cardenales rezarían las Vísperas y regresarían a Santa Marta.
Si después de tres días los cardenales no se han puesto de acuerdo, entonces se les concederá una pausa de un día para reflexionar.
Habemus papam.
Cuando por fin se produzca la fumata blanca, sonarán las seis campanas de la basílica de San Pedro. El papa electo se dirigirá a la llamada sala de las lágrimas, donde encontrará los hábitos papales en tres tallas distintas, para que cualquier electo pueda vestirlos. Tras el anuncio del Habemus papam en el balcón de la logia central de la basílica de San Pedro, el nuevo pontífice se presentará ante los fieles y concederá la bendición Urbi et Orbi, que solo los pontífices pueden impartir y que se reserva al día de su elección, el Domingo de Resurrección y Navidad.


Los bomberos instalan la chimenea que anunciará la elección del nuevo papa. / Associated Press/LaPresse / APN
El cónclave, al detalle | Cómo se consigue el color de la fumata
El humo que sale por la pequeña chimenea instalada en el tejado de la Capilla Sixtina para los cónclaves puede ser blanco, revelando al mundo que se ha elegido al nuevo papa, o negro, si los cardenales no han llegado a un acuerdo. Ese humo es el resultado de quemar las papeletas en las que los cardenales indican a quién dan su apoyo. En el pasado, para lograr que el humo saliera negro se añadía paja húmeda pero, dado que podía resultar complicado distinguir con claridad el color del humo, desde hace al menos dos cónclaves se utilizan preparados químicos que dan un color inconfundible a la fumata. Para la blanca, se añade a las papeletas un compuesto de clorato de potasio, lactosa y colofonia. Para la fumata negra, perclorato de potasio, antraceno y azufre.

El primer acto del cónclave es una misa en San Pedro
El cónclave para elegir el sucesor del papa Francisco ha arrancado este miércoles a las 10.00 con la misa Pro eligendo Pontifice, presidida por el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re. Se celebra en la basílica de San Pedro, en el Vaticano.

El cónclave, al detalle | El encuentro más numeroso, con 133 electores
El cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco es el más numeroso y el más internacional de la historia, con 133 cardenales de 71 países. Es la primera vez que se supera el umbral de 120 electores. De hecho, ha habido críticas contra la última tanda de nombramientos de Bergoglio, el pasado diciembre. La mayor participación conlleva un mayor número de votos para alcanzar la fumata blanca: 89.
A esto se suma que gran parte de los participantes en el cónclave no se habían visto nunca antes del fallecimiento del Pontífice, con lo que establecer pactos y llegar a consensos se hace más complicado.

La tensión subterránea en la Iglesia es evidente. Solo han pasado cuatro días de la muerte de Francisco y ya han empezado a desplegarse los bandos a la luz del día. Antes incluso del funeral del Pontífice, se están delineando las dos grandes corrientes que se enfrentarán en el cónclave, en la primera semana de mayo, en fecha aún por concretar. Simplificando, por un lado, los cardenales que quieren seguir el camino de apertura y reformas, de una Iglesia globalizada y no eurocéntrica, abierto por Francisco; y por otro, quienes han vivido mal este pontificado y desean echar un freno. Quien cree, en definitiva, que esto solo ha sido el inicio de un viaje aún muy largo que es el único futuro de la Iglesia, y quien piensa lo contrario, que ya se ha ido demasiado lejos y se debe echar el freno para corregir errores, para que este último mandato quede como un paréntesis a olvidar.


El decano de los cardenales, Cardinal Giovanni Battista Re, preside la misa de este miércoles en la Basílica de San Pedro. / Murad Sezer / REUTERS
El decano de cardenales pide “el papa que la Iglesia y la humanidad necesitan en este momento tan difícil”
El decano de cardenales, el italiano Giovanni Battista Re, ha presidido en la basílica de San Pedro, en el Vaticano, la misa Pro eligendo Pontifice. Esta homilía se suele leer con interés porque da pistas, resume la visión del nuevo papa que ha ido cristalizando en los días previos. Battista Re, que no participa en el cónclave por tener más de 80 años, ha dicho que espera que salga elegido “el papa que la Iglesia y la humanidad necesitan en este momento de la historia tan difícil y complejo”.
El cardenal italiano ha llamado a la unidad, en previsión de un cónclave dominado por una fuerte división interna: “Es fuerte la llamada a mantener la unidad de la Iglesia en la senda trazada por Cristo a los Apóstoles. La unidad de la Iglesia es querida por Cristo; una unidad que no significa uniformidad, sino una firme y profunda comunión en la diversidad, siempre que se mantenga en plena fidelidad al Evangelio”.
Para terminar, Battista Re se ha referido a la situación de la iglesia en el mundo de hoy en día y sus retos: “Recemos para que Dios conceda a la Iglesia el papa que mejor sepa despertar las conciencias de todos y las fuerzas morales y espirituales en la sociedad actual, caracterizada por un gran progreso tecnológico, pero que tiende a olvidarse de Dios. El mundo de hoy espera mucho de la Iglesia para la tutela de esos valores fundamentales, humanos y espirituales, sin los cuales la convivencia humana no será mejor ni portadora de bien para las generaciones futuras”.

El cónclave, al detalle | ¿Cuánto han durado los últimos encuentros para elegir papa?
Los cónclaves del último siglo han sido relativamente breves y han durado entre dos y cinco días. En 2013, Francisco fue elegido el segundo día de cónclave tras cinco votaciones: una el primer día, dos el segundo día por la mañana y otras dos esa misma jornada por la tarde. Benedicto XVI fue elegido en 2005 también tras dos días de votaciones, en los que se celebraron cuatro escrutinios. El cónclave del que salió Juan Pablo II en 1978 duró tres días en los que hubo ocho votaciones. El más largo del último siglo y medio es el de 1922, cuando Pio XI fue elegido en un Cónclave que duró cinco días, tras 14 votaciones.

La Iglesia católica afronta el reto de revertir o dar continuidad al legado de aperturismo que ha dejado el papa Francisco.
Puedes leer aquí el editorial de EL PAÍS publicado el 5 de mayo

Los cardenales se retiran a almorzar antes de encerrarse en la Capilla Sixtina
Los cardenales que participarán desde este miércoles en el cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco han terminado la misa Pro Eligendo Pontifice y ahora almorzarán juntos antes de encerrarse en la Capilla Sixtina.
Tras la eucaristía, los 133 cardenales con derecho a voto en el cónclave, por tener menos de 80 años, deberán permanecer dentro del territorio vaticano pues tienen prohibido abandonarlo y comunicarse con alguien del exterior hasta que hayan elegido a un nuevo pontífice.
Los purpurados han regresado a la residencia Casa Santa Marta, donde dormirán durante el cónclave, para un almuerzo. Esta será la primera comida que reunirá a la totalidad de los votantes, lo que puede dar pie a debates o conversaciones. Tras el almuerzo, los cardenales han sido convocados a las 16.15 hora local (14.15 GMT) en la Capilla Paulina del Palacio Apostólico y después procesionarán hasta la cercana Capilla Sixtina para encerrarse y llevar a cabo la primera votación. (EFE)


En la imagen, difundida el sábado 3 de mayo por Vatican Media, muestra una estufa temporal dentro de la Capilla Sixtina del Vaticano, que emitirá la fumata, blanca o negra. / Associated Press/LaPresse / APN
El cónclave, al detalle | Así funciona la estufa que quema las papeletas
En la Capilla Sixtina se ha colocado la estufa tradicional de hierro fundido que se utiliza desde el cónclave de marzo de 1939, cuando salió elegido Pío XII. Con ella se anuncia al mundo el resultado de las votaciones de los cardenales, quemando las papeletas que han utilizado para votar. En realidad, hay dos estufas, la mencionada y otra auxiliar que permite controlar el color de las fumatas. En el momento en el que se queman las papeletas se activa un dispositivo electrónico en la segunda, donde se queman diversas sustancias químicas (diferentes en función de si se desea una fumata blanca o negra) durante entre seis y siete minutos. Ambas estufas conectan con el tubo interno de la chimenea, de unos 15 metros de altura. La parte externa, que mide cerca de dos metros, es visible desde la plaza de San Pedro.
La estufa principal, de forma cilíndrica, tiene una altura de aproximadamente un metro y un diámetro medio de 45 centímetros. Cuenta con una puerta inferior para encender el fuego y una abertura superior por donde se introducen los documentos a quemar. En la tapa superior de la estufa están inscritas las fechas y elecciones de los cónclaves anteriores. Fuera de la Capilla Sixtina espera un técnico con un mando a distancia para activar la estufa auxiliar, y preparado para intervenir si alguna de las dos no funciona.

Un deseo de “suerte” al cardenal Parolin en la misa antes del cónclave suscita curiosidad
Un deseo de “suerte” al cardenal Pietro Parolin durante la misa de esta mañana en la basílica de San Pedro ha suscitado curiosidad, pues se escuchó pocas horas antes del inicio del cónclave en el que el purpurado italiano se presenta como una de las grandes apuestas. Las palabras pudieron escucharse en el momento de darse la paz en la misa Pro eligendo pontifice, de boca del cardenal encargado de oficiarla, el decano Giovanni Battista Re. En ese momento, el purpurado se dirige a Parolin, situado a su derecha en el altar, y le dice, separado del micrófono: “Suerte por partida doble” (auguri... doppi), entre sonrisas.
El vídeo se ha popularizado en las redes sociales y en los medios italianos, que especulan con posibles interpretaciones: estos buenos deseos pueden ser por el rol de Parolin dentro del cónclave, encargado de dirigirlo, o ante la eventualidad de que sea elegido. Re es el decano del Colegio Cardenalicio y, aunque no votará en el cónclave desde esta tarde debido a que supera los 80 años de edad, ha dirigido las reuniones diarias que los purpurados han mantenido en Roma en los días previos a esta cita. (Efe)

En la Capilla Sixtina se vota y en la Casa Santa Marta se desayuna, se almuerza, se cena, se reza, se duerme. Incluso se bebe. Hace algunos días trascendió que un cardenal extranjero —la anécdota la contó un arzobispo italiano— se creía que las bebidas del minibar eran gratis, y decidió invitar a otros purpurados a su habitación. Al día siguiente comprobó en la factura que, salvo en los días sagrados del cónclave que empieza el miércoles, la residencia de Santa Marta es lo que es, un hotel de paso para los eclesiásticos que recalan en Roma y una especie de colegio mayor para trabajadores del Vaticano, aunque Jorge Mario Bergoglio decidiera nada más ser elegido irse a vivir allí, para sorpresa, escándalo y malestar ―sucesivamente— de la curia romana.
El cónclave más complicado de los últimos tiempos, por la división entre los cardenales, aún no ha empezado y ya hay una polémica en marcha. En el Vaticano expresan más los gestos y los silencios, o lo que se lee entre líneas, que lo que se dice, y los cardenales están muy avezados en la interpretación de señales. Por eso han causado sorpresa y murmullos, que en Roma ya se han extendido, dos episodios de la misa Pro Elegendo Pontifice, la ceremonia previa al cónclave que se ha celebrado este miércoles a las diez de la mañana en la basílica de San Pedro.
El decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re, no ha mencionado a Francisco en su homilía, una sorprendente omisión sin precedentes en los anteriores cónclaves. “No se le puede haber olvidado, es deliberado”, opina un prelado. Tanto en 2005 como en 2013, en la misma homilía no faltó un recuerdo afectuoso de reconocimientos al papa anterior.
El sector que desea continuar con el legado de Jorge Mario Bergoglio lo interpreta como una señal clara, además de una incomprensible falta de cortesía, de que la corriente más conservadora desea pasar página y cambiar de rumbo. Pero, además, Re ha tenido un gesto personal muy significativo, fuera del protocolo, al terminar la ceremonia: ha abrazado a Pietro Parolin, el favorito en las quinielas como candidato de consenso, y por el micrófono se ha oído: “Auguri (Enhorabuena)”.

El polémico abrazo que señala a Parolin como el candidato de los conservadores
El decano de los cardenales, Giovanni Battista Re, no ha nombrado al papa Francisco en la homilía, algo que siempre se suele hacer, y además ha dado un abrazo al cardenal Pietro Parolin al terminar, felicitándole. “Es un acto fuera del protocolo que podría ser de afecto, pero en el contexto en el que estamos ha sido interpretado como que lo está señalando como el candidato oficial del sector más conservador de la curia”, explica en el programa especial sobre el cónclave de EL PAÍS el corresponsal en Roma, Íñigo Domínguez.

Parolin se ha colocado como vía intermedia entre los cardenales más conservadores y quienes quieren reformas
El cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado de la Santa Sede, parece ser quien más apoyos reúne para ser nombrado papa, explica el corresponsal de EL PAÍS en Roma, Íñigo Domínguez: “Ha sabido colocarse como una especie de vía intermedia entre seguir con Francisco, pero corregir un poco lo que ha hecho. Era la mano derecha de Francisco, aunque se interpreta que es más moderado, diplomático e institucional. Además, ha podido labrarse apoyos en muchos países durante esos años, es muy conocido”. Al haber 133 cardenales de 71 países distintos, eso le da cierta ventaja, explica Domínguez, aunque añade: “En un cónclave lo que cuenta no son los votos que tienes, sino tu capacidad para ganar más”.

Las congregaciones no han allanado demasiado el camino para las votaciones
La cantidad de cardenales reunidos en este cónclave, 133, y el hecho de que mucho de ellos ni siquiera se conocieran antes de la muerte de Francisco por su diversa procedencia (71 países diferentes) daban especial importancia a las congregaciones de purpurados celebradas antes del cónclave. Sin embargo, el profesor de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Javier López, explica que no parece que estas reuniones hayan sido muy fructíferas. “No se ha llegado a muchas conclusiones, cada uno ha volcado lo que traía puesto desde casa”, ha dicho.

Una reunión patriarcal, con 133 hombres
La periodista Mariola Lourido destaca de entre las reformas pendientes que heredará el nuevo papa el papel de la mujer en la Iglesia. “La igualdad de la mujer es una revolución que no se ha hecho. Los avances de Francisco han sido tímidos e insuficientes. Esta tarde vamos a ver una reunión totalmente patriarcal con 133 hombres”, ha señalado.

La agenda de la tarde: empieza el cónclave y se espera la primera fumata
Tras la homilía de la mañana, estas son las horas clave de la tarde en la primera jornada del cónclave para elegir al sustituto del papa Francisco.
— 16.15 Los cardenales se dan cita en la capilla Paulina y desde ahí, ataviados con sus hábitos rojos y blancos, procesionan entonando las letanías y el canto Vieni Creator hasta la Sixtina.
— 16.30 Los cardenales entran en la Capilla Sixtina. Una vez allí, deben prestar juramento uno a uno con la mano sobre el Evangelio. Después, el maestro ceremoniero de la Santa Sede, Diego Ravelli, expulsa de la capilla a todo aquel que no vista la púrpura con la fórmula en latín Extra omnes (Fuera todos) y cierra las puertas. A continuación, se celebra una catequesis para inspirar a los votantes, dirigida por el cardenal Raniero Cantalamessa (quien no cuenta con derecho a voto). Al terminar, sale de la capilla junto al arzobispo Ravelli para que empiece la votación.
— 19.00 La primera fumata se espera esta tarde a partir de las 19.00, aunque lo más probable es que la elección del nuevo papa no se produzca en la primera votación. La chimenea en lo alto de la capilla emanará el humo de los votos quemados por los cardenales en una estufa: si es de color negro, no ha habido acuerdo; si es blanco, hay nuevo papa.

Francisco también nombró a cardenales que hoy no votarán por un papa progresista
El periodista de EL PAÍS Jorge Marirrodriga explica que el hecho de que el papa Francisco nombrara a gran parte de los purpurados que hoy votarán a su sucesor en el cónclave no significa que el pontífice resultante sea, obligatoriamente, progresista. “Estamos trasladando la política a la dinámica de la Iglesia. Cuando Francisco decía que en la Iglesia caben todos, estaba diciendo cómo pensaba y cómo estaba dispuesto a gobernar. Y, efectivamente, nombras cardenales que son más afines a tu visión de la Iglesia, pero también a otros menos afines. Serías un mal gobernante si solo tuvieras personas que te dan la razón en todo”.
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